Nací en Isla Cristina, un pueblo situado en la costa
occidental de la provincia de Huelva, Andalucía. Este pueblo debe sus orígenes al terremoto de Lisboa de 1755, que cambió gran parte del
litoral onubense, haciendo que en la zona occidental se formara una pequeña
isla, lugar donde se encuentra esta
localidad. Recuerdo que de pequeña iba con mis padres y hermanos a la playa, me
encantaba encontrar la marea baja, porque podía coger coquinas para después
comérmelas, esta práctica está actualmente prohibida.
Aquí
siempre hemos temido a que se produzca un nuevo terremoto o tsunami y
desaparezca esta isla de la misma manera que se formó.
Ahora
en tiempos de marea baja el tsunami llega con más fuerza que nunca arrasando
todo lo que encuentra a su alrededor, todo lo que nos hace libres pensadores,
la cultura es su principal enemigo.
Vivimos un momento con situaciones polémicas como el
cierre de Centros de Arte, los recortes de presupuestos de los museos, etc. la actual crisis, ratifica el fracaso
de nuestro modelo social y económico y no se entiende la cultura como una
herramienta para el desarrollo humano.
Los
recortes llegaron a la cultura. No es que estuviéramos bien. siempre hemos
estado en crisis; ahora toca apretarse más el cinturón mientras otros seguirán
engordando sus bolsillos a costa de la “cultura”
Marea baja es un
proyecto que reflexiona sobre la
situación que nos toca vivir La crisis económica ha afectado profundamente a
las instituciones
culturales y sobre
todo a los museos, estos tiene como objetivos enriquecer a las personas en el
sentido cultural educándolos como miembros de una comunidad que debe valorar
los productos culturales, un museo por tanto tiene una función social.
En este sentido el
proyecto no habla de los museos como metáfora de catedrales o parque de
atracciones sino como fundamento de la cultura contemporánea.
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